Sergio de Francisco Pastor - Colmenar Viejo, Madrid

Sergio de Francisco Pastor es un profesional experimentado en el campo de la electrónica, con una sólida trayectoria en la que destaca su habilidad para proporcionar soluciones técnicas eficientes y personalizadas. Con sede en la calle del Sombrerero número 34, en Colmenar Viejo, Madrid, España, su empresa goza de una excelente ubicación que facilita el acceso tanto para clientes locales como para aquellos que provengan de zonas más alejadas.

Su especialidad en Electricista lo convierte en un referente en el ámbito de la electrónica, ofreciendo un amplio abanico de servicios que van desde la instalación y reparación de sistemas eléctricos, hasta el diseño y desarrollo de soluciones customizadas a medida que las necesidades de cada cliente. Además, cuenta con una amplia experiencia en el ámbito de las instalaciones de iluminación, cableado estructurado y sistemas de seguridad, lo que lo posiciona entre los profesionales más solicited en su campo.

Uno de los aspectos más destacados de Sergio de Francisco Pastor es su enfoque personalizado y compromiso con la calidad. Cada proyecto es abordado con un enfoque personalizado, poniendo especial atención a las necesidades específicas de cada cliente y buscando siempre la solución más adecuada. Esto, sumado a su experiencia y formación, le permite ofrecer un servicio de alta calidad y confiabilidad.

En cuanto a sus valores, la satisfacción del cliente es su principal prioridad. Para ello, ofrece un trato cercano y profesional, garantizando siempre un trabajo de primera calidad y a tiempo. Además, su equipo está formado por profesionales cualificados y comprometidos, lo que garantiza una atención integral y una solución rápida y efectiva a cualquier problema que pueda surgir.

Respecto a las opiniones de sus clientes, Sergio de Francisco Pastor no tiene valoraciones en Google My Business hasta el momento. Por lo tanto, no se dispone de información sobre la opinión media de los usuarios. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la falta de valoraciones no necesariamente implica una mala calidad de servicio, sino que podría indicar que el cliente no ha tenido la necesidad de recurrir a otros medios para expresar su satisfacción o insatisfacción.